La Fiscalía de la próxima década

Ricardo Sosa

https://www.elsalvador.com/opinion/editoriales/la-fiscalia-de-la-proxima-decada/649582/2019/

La semana anterior me referí al presupuesto de la Fiscalía General de la República (FGR) para 2020 y la necesidad de hacer una revisión y asignación superior que rompa el paradigma de sesenta y siete años desde su fundación de asignarle recursos insuficientes y que cuente con instalaciones propias.
Pero para combatir el crimen organizado, pandillas, delincuencia y delitos relacionados, es indispensable acciones no sólo presupuestarias que por supuesto son vitales, pero que requieren además de recursos financieros la voluntad política de exponerlas, estudiarlas y sobre todo ejecutarlas, para que sucedan los cambios. Entre las principales puedo proponer:
-La investigación fiscal y persecución delito presenta la debilidad actual de que la FGR no cuenta con investigadores propios y dirige la investigación; algunos casos requieren el compartimentaje de la información a nivel fiscal. Incremento de capacidad investigativa y operativa. Ya tenemos una Dirección de Análisis, técnicas de investigación e información (DATI) de la FGR especializada y técnica, modelo en la región, no partimos de cero.
-Laboratorios forenses de la FGR: es inexistente a la fecha, tiene que ser cliente de la PNC y del Instituto de Medicina Legal. Una FGR sin investigación forense especializada y moderna le presentará siempre limitaciones para prueba técnica pericial al momento de judicializar los casos y la hará depender o utilizar el recurso del imputado criteriado.
-Plan de carrera para fiscales: mujeres y hombres fiscales necesitan un plan de carrera integral que les proporcione la certidumbre de qué pasa desde el día uno hasta el día de su retiro, incluye capacitación, adiestramiento, cursos especializados, posgrados, maestrías, prestaciones adicionales a las de ley y las remuneraciones en salarios y horas extraordinarias. Ya la Escuela de Capacitación Fiscal hace y ha hecho una labor extraordinaria en formación y especialización, pero falta los incentivos económicos.
-Fortalecimiento de los programas de atención a víctimas, testigos y ciudadanos que denuncian: evitando re victimizaciones y exposiciones, al mejorar los laboratorios forenses no se dependerá de ellos para el momento del foro. Y la prueba científica tiene bajo costo en relación a casas de resguardo, alimentación, transporte y otros.
-Período del nombramiento: con presupuesto y apoyo de los aspectos anteriores, nuestra sociedad requerirá de una o un fiscal, para un período de cinco años, sin derecho a re elección. Esto evitará que el último año baje su intensidad de trabajo por entrar en campaña.
-Instituto de Ciencias Forenses, que idealmente debería estar bajo la dirección de la FGR ya que dirige la investigación, con un consejo directivo interinstitucional para establecer auditoría, control, equilibrio, para equipos conjuntos de análisis criminal y forense, big data, medidores de impacto y que aporte información para políticas de prevención y otros.
Las administraciones del Fiscal General anterior, Lic. Douglas Meléndez, y la actual del Dr. Raúl Melara han marcado un antes y un después, son evidencia de que además de la voluntad y convicción de hacer su trabajo al frente de la FGR y sus equipos de trabajo, fiscal general adjunto, direcciones y jefaturas, no son suficientes si no se cuenta con una estructura que brinde el soporte necesario para convertir a la FGR en fuerte, justa, independiente, calificada, moderna, creíble y modelo en Latinoamérica.

Experto en seguridad y criminología.